03/Octubre/2012
Jeanette Hinostroza
Esto fue lo que preguntó el presidente Correa en la sabatina en la que Pedro Delgado intentaba explicar cómo financió la compra de su "casita con piscinita" en Miami. Entre la información que llegó a nuestra redacción está un intercambio de correos electrónicos entre Pedro Delgado y el abogado Juan Borja Charvet; en ellos Delgado da claras instrucciones y coordenadas para que Borja haga dos transferencias: una de $35 mil otra de $165 mil, a la cuenta de la inmobiliaria que le vendió la casa en Miami. El –Swift- o registro de la transferencia de $35 mil lo tenemos en nuestro poder y especifica claramente que la persona que envía el dinero es el abogado Juan Borja Ch. y no la empresa – FFC - que Delgado menciona en la sabatina como la autora de esta transferencia. Hasta el momento no encontramos registro de FFC, dónde opera, ni a qué se dedica.
Pedro Delgado se ha contradicho varias veces: en un principio dijo que financió su casa con un crédito a 15 años en los Estados Unidos, luego dijo que fue el Austrobank de Panamá quien le prestó la totalidad del dinero, a 10 años plazo y ahora dice que hay una segunda empresa – FFC – quien también le ayudó a financiar la casa y que estaría representada por este señor Juan Borja Ch.
Después de esta confusa explicación, el presidente Rafael Correa pregunta con irónica sonrisa – "Pedro, ¿y cómo obtuvieron tus correos electrónicos? Yo me atrevo a responderle que exactamente de la misma manera en que Julián Assange consiguió toda la información del Departamento de Estado para hacerla pública en el portal WikiLeaks.
La mayoría de documentos del caso Cofiec llegó a nuestra redacción en sobres cerrados y sin remitente. Otra información fue oficialmente entregada por la Superintendencia de Bancos al asambleísta Kléver Jiménez.
Si el Ecuador desafió a tres países para defender el derecho de Assange a revelar información trascendental para el mundo, yo espero que casa adentro no se les ocurra sancionarnos por revelar correos electrónicos que están sirviendo para destapar esta olla podrida de Cofiec.
La casa de Pedro Delgado es cosa de niños, lo de fondo está en saber por qué las empresas incautadas le pidieron $4 millones a COFIEC y tampoco pagan. Según los reportes de la Superintedencia de Bancos, al momento este banco registra $1 millón 200 mil n contra. El Directorio de Cofiec y los operarios del banco tienen que explicar cómo recibieron más de $1 millón en efectivo de la Embajada de Irán en Quito sin pedir explicación de la procedencia de ese dinero.
Como las autoridades de control hasta ahora no se mueven, seguirá siendo tarea de los periodistas continuar destapando esta podredumbre y, de paso, contar a dónde fue a parar el dinero que le entregaron alegremente al argentino Gastón Duzac, a qué cuentas se transfirió después de haber pasado por Nueva York y Suiza.
Por suerte hay en el mundo muchos especialistas dedicados a descubrir la ruta de este tipo de dinero.
Pedro Delgado se ha contradicho varias veces: en un principio dijo que financió su casa con un crédito a 15 años en los Estados Unidos, luego dijo que fue el Austrobank de Panamá quien le prestó la totalidad del dinero, a 10 años plazo y ahora dice que hay una segunda empresa – FFC – quien también le ayudó a financiar la casa y que estaría representada por este señor Juan Borja Ch.
Después de esta confusa explicación, el presidente Rafael Correa pregunta con irónica sonrisa – "Pedro, ¿y cómo obtuvieron tus correos electrónicos? Yo me atrevo a responderle que exactamente de la misma manera en que Julián Assange consiguió toda la información del Departamento de Estado para hacerla pública en el portal WikiLeaks.
La mayoría de documentos del caso Cofiec llegó a nuestra redacción en sobres cerrados y sin remitente. Otra información fue oficialmente entregada por la Superintendencia de Bancos al asambleísta Kléver Jiménez.
Si el Ecuador desafió a tres países para defender el derecho de Assange a revelar información trascendental para el mundo, yo espero que casa adentro no se les ocurra sancionarnos por revelar correos electrónicos que están sirviendo para destapar esta olla podrida de Cofiec.
La casa de Pedro Delgado es cosa de niños, lo de fondo está en saber por qué las empresas incautadas le pidieron $4 millones a COFIEC y tampoco pagan. Según los reportes de la Superintedencia de Bancos, al momento este banco registra $1 millón 200 mil n contra. El Directorio de Cofiec y los operarios del banco tienen que explicar cómo recibieron más de $1 millón en efectivo de la Embajada de Irán en Quito sin pedir explicación de la procedencia de ese dinero.
Como las autoridades de control hasta ahora no se mueven, seguirá siendo tarea de los periodistas continuar destapando esta podredumbre y, de paso, contar a dónde fue a parar el dinero que le entregaron alegremente al argentino Gastón Duzac, a qué cuentas se transfirió después de haber pasado por Nueva York y Suiza.
Por suerte hay en el mundo muchos especialistas dedicados a descubrir la ruta de este tipo de dinero.
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