PALOS DE CIEGO / Pozo, Mauricio

No es posible buscar mejores días para los pobres a través del deterioro de la riqueza nacional. No es viable mejorar el empleo destruyendo la gran empresa. No se puede repartir producción sin producción. No se puede pedir que se respete la majestad del poder si el jefe Estado no respeta a sus ciudadanos. No hay desarrollo económico sin adecuadas relaciones internacionales. No hay democracia sin poderes independientes. No hay institucionalidad sin entidades de control autónomas del poder ejecutivo. No hay paz social sin empleo, no habrá empleo sin crecimiento económico ni habrá este sin inversión. No hay crecimiento de la inversión nacional sin el concurso del sector privado. Los pobres no salen de la pobreza porque les regalen la plata vía una lista interminable de subsidios, la receta es tener empleo y remuneraciones dignas. La capacidad de promoción del crecimiento económico a través del gasto público es mucho más un asunto cualitativo que cuantitativo. Si la estructura del gasto público es mala, mucho en gasto corriente y en subsidios en desmedro del gasto de capital, no es viable la promoción de la inversión. Tampoco un gasto importante de inversión pública es sostenible sin el aporte del gasto privado. Pretender manejar situaciones de mercado con leyes solo produce más distorsiones y problemas. Los problemas de mercado se atacan con instrumentos de mercado. El estado fija los límites de la cancha, no es actor. Reducir las tasas de interés a la "fuerza" en lugar de favorecer a la gente la afecta, pues el crédito se reduce y desplaza esas personas a la informalidad. El Ecuador está dando palos de ciego. Hoy, 8 feb. 2010, p. 4