EL DESEMPLEO SUBE, PESE A TODO / Hoy

El presidente Correa dijo haber recibido con sorpresa la noticia de que el desempleo aumentó en el país en el primer trimestre de 2010. La cifra, 9,1 por ciento, es superior a la que cerró el año pasado con 7,9 por ciento y, según explicó el mandatario, la causa más probable del incremento "ha sido la sequía en la Sierra central". El presidente es optimista y sostiene que las cifras son manejables, comparándolas con otros países, como los Estados Unidos con el 8,5 por ciento o España con el 16 por ciento. Haber colocado estos países con economías mucho más desarrolladas como un espejo que refleje nuestra buena posición puede resultar en una imagen distorsionada de nuestra realidad. No hay que olvidar que estos países no sufren en la misma medida nuestra del rango de subempleo, que en el Ecuador alcanza el 51,3 por ciento. Son personas que no gozan de un empleo fijo, y cuyos ingresos varían de acuerdo a las actividades comerciales o de servicios que realizan por cuenta propia. Así, tenemos que la verdadera cifra de personas que no tienen sueldos fijos llega al 60 por ciento de la población económicamente activa. Según las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, solo 1,7 millones de ecuatorianos cuentan con un trabajo estable, de un total de 4,6 millones que están en plenas condiciones de trabajar. Esas son las cifras que el Gobierno debe manejar, y no tratar de suavizar la realidad con manejos convenientes de los números. De nada sirve intentar engañarnos a nosotros mismos cuando es común y creciente la información de que, cada día, más personas pierden su empleo en el Ecuador. Este resulta un buen momento para revisar las políticas laborales del Gobierno, que, a simple vista, no están dando buenos resultados. Hoy, 23 abr. 2010, p. 5