COMERCIO EXTERIOR ECUATORIANO / Cadena, Eduardo

Hasta octubre del presente año y por tercer año consecutivo, el saldo de la balanza comercial del Ecuador es negativo, esta vez por $1 276 millones; es decir que el resultado de nuestro comercio con el exterior es que salen mucho más dólares de los que entran, lo que representa evidentemente un desequilibrio muy peligroso para una economía dolarizada y que ha podido ser compensado en gran parte mediante un fuerte endeudamiento con la China. Este problema se presenta a pesar de que los precios de la gran mayoría de nuestros productos de exportación han crecido; así, el precio promedio de nuestras exportaciones, según las cifras del Banco Central, han aumentado en 25 por ciento hasta octubre. Sin embargo, nuestro país no ha podido beneficiarse en lo que debería de este incremento de precios, ya que el volumen de sus exportaciones ha caído en 1 por ciento, siendo las exportaciones petroleras las que arrastran este resultado con una disminución de volumen superior al 6 por ciento. Cuando no existe la inversión necesaria, los volúmenes de exportación se estancan, a pesar del gran incentivo que deberían ser los altos precios; lastimosamente, el obeso aparato burocrático en el caso petrolero y la nula política comercial en el resto de productos hacen muy difícil el desarrollo del indispensable sector externo ecuatoriano. La inversión externa de Colombia cierra este año con un valor superior a $9 200 millones; la del Perú en $8 500 millones; la del Ecuador en $157 millones. Así, tanto el Perú como Colombia al igual que el Ecuador han incrementado fuertemente sus importaciones pero, a diferencia de nosotros, ellos no tienen problema, ya que, al atraer y generar inversión y tener una verdadera política comercial externa a largo plazo, han logrado duplicar sus exportaciones en los últimos cuatro años. Por el contrario, el Gobierno del Ecuador, al no generar condiciones de expansión de exportaciones e incrementar a la vez fuertemente las importaciones, lo que se ha visto obligado a hacer es poner medidas restrictivas a la economía, aumentando impuestos e introduciendo listas de protección de ingreso de productos, siendo medidas eminentemente contractivas para equilibrar las cuentas que su política errada han producido. Dinero, Diario de Negocios, 21 dic. 2011, p. 2