sábado, 16 de febrero de 2013

MATANDO LA DOLARIZACION / Neira, Xavier

He sostenido que ese trasatlántico llamado dolarización por sí solo no es la panacea. Ha traído evidentes efectos redistributivos sobre el ingreso de los ecuatorianos. La estabilidad de precios ha elevado el nivel de vida de todos. De un salario mínimo vital de $102 por mes, hoy estamos en $264. Gracias a la dolarización, adoptada en 2000 como parte de un conjunto de reformas estructurales imprescindibles, hemos tenido un sostenido crecimiento a base de la confianza que genera ese modelo. De una economía de $12 000 millones (2000) hemos pasado a una de casi $62 000 millones, 11 años después. Lamentablemente, dichas reformas no solo que no se han implementado totalmente, sino que han sido boicoteadas, cuando no sustituídas por decisiones anti-dolarizadoras. La "pérdida de soberanía" ha sido el arpón favorito de la izquierda fosilizada para pinchar la dolarización. Una última "bomba" es el aumento al Impuesto "verde" a la salida de divisas (ISD) del 2 por ciento al 5 por ciento lo cual aleja aún más posibilidades de mayor inversión privada, y afectará la estructura de costos haciéndonos menos competitivos. Tan buena fue la dolarización, que a pesar de todos los avatares, boicots, etc. aún subsiste, enfrentando a quienes la detestan, por razones políticas antes que por otro motivo. Cómo será de buena que, pese al manejo fiscal imprudente -por decir lo menos- abiertamente antidolarizador que practica el oficialismo, no logran, hasta hoy, hundir ese trasatlántico. ¿Se imagina el nivel de inflación que tendríamos si funcionara la maquinita para emitir moneda propia? Cabe la pregunta ¿y la economía real? ¿Hasta cuándo espera? Hoy, 28 nov. 2011, p. 4

No hay comentarios:

Publicar un comentario