jueves, 19 de noviembre de 2015

El costo del gasto público

Gabriela Calderón: El gasto público a veces es percibido por algunos como algo inherentemente bueno. Asumen que a más gasto, más prosperidad para todos. El gasto público, así como el empleo público, puede ser bueno si es que resulta ser más productivo ahí que en otro lugar. Pero esto suele ser así en casos muy limitados debido a los incentivos a los que están sometidas las operaciones del Estado. Por esta razón puede ser que en el sector público, durante una recesión, el gasto en sueldos sigue aumentando. La proforma presupuestaria de 2016 contiene una asignación de $ 8.789,6 millones para sueldos del sector público. En un estudio de 2003 Pedro Romero y Fabián Chang recomendaron realizar un presupuesto base cero (PBC). Esto implica dejar de utilizar como referencia lo que se gastó en el año anterior y partir de una "base cero". Dicha evaluación serviría para transparentar la administración pública y mejorar la calidad del gasto. Es probable que entidades como la Secretaría del Buen Vivir o el Instituto Espacial Ecuatoriano o los seis ministerios coordinadores no sobrevivirían a dicho análisis. Todo eso nos devuelve a la fundamental pregunta de qué queremos que haga el Estado (léase los políticos) y quién queremos que lo pague. El Universo, Año 95 N°59 13 nov. 2015, p. 8

No hay comentarios:

Publicar un comentario