EL FIN DE LAS PREFERENCIAS NO SOLO TIENE COSTOS ARANCELARIOS / Hoy

La renuncia irrevocable a los beneficios de las preferencias que ha anunciado el Gobierno, a través de las declaraciones de Fernando Alvarado, el secretario de Comunicación del Gobierno, no solo echan a pique los esfuerzos de Nathalie Cely, tanto para la renovación de la ATPDEA como para la migración de los tres productos al SGP, sino que dañan las relaciones con los Estados Unidos. No se trata solo de exenciones arancelarias, que la embajadora Cely calculaba en $35 millones, que se puedan enfrentar con compensaciones fiscales, sino lo más grave es el frenazo que representa para el sector exportador ese impromptu político: ante estos horizontes de incertidumbre y deterioro de las relaciones con el principal socio comercial del Ecuador, ¿podrán pensar los exportadores en planes de expansión y desarrollo? Las desventajas de competitividad derivan en pérdida paulatina de un mercado. Hoy, 1 jul. 2013, p. 1