sábado, 2 de marzo de 2013

Y EL TEMA SIGUE PENDIENTE / Pachano, Abelardo

Ya son cinco años de crisis en las economías maduras. En algunas las angustias fueron superadas con decisiones heroicas, para algunos controversiales, que dieron resultado y no causaron costo a los gobiernos. Con ello, las lecciones de fines de los años veinte e inicios de los treinta en el siglo pasado para paliar los daños sociales fueron aprendidas. No así los principios de un buen manejo económico, pues se desafiaron las bases de la prudencia, el equilibrio y la estabilidad. En otros países todavía se lucha por concertar acciones. Se avanza pero aún está viva la ansiedad y cuesta mucho discernir que la solidaridad de los mercados comunes demanda soluciones con costos compartidos, eso sí bien entendido que hay premisas de corrección de los desbalances identificados. EE.UU., Europa, Japón siguen batallando para terminar el ciclo de destrucción de valor y entrar en el constructivo de recuperación social y crecimiento sostenido, pero ahora deben hacerlo manteniendo los conceptos que defienden la credibilidad y ofrecen confianza, vitales para la construcción de sociedades de alto bienestar. Las perspectivas no son muy alentadoras. Estas economías que representan más del 65 por ciento del PIB mundial todavía necesitan algunos años para salir de su dolor. Buena parte de América Latina mira con un poco de tranquilidad todo este complejo problema. En muchos casos está preparada para enfrentar los embates, pero todavía debe tomar medidas de consolidación. Mientras otros países no interiorizan los posibles efectos en el comercio mundial y sostienen políticas económicas en sus relaciones internacionales de baja prioridad. O no contemplan como posible la contaminación en los centros económicos del mundo emergente. El Comercio, 23 dic. 2011, p. 10

No hay comentarios:

Publicar un comentario